Una de las técnicas para dar mayor realismo a la realidad aumentada es la oclusión: no mostrar partes del modelo virtual cuando están detrás de un objeto real.
Habitualmente en la Realidad Aumentada los objetos se superponen a la imagen captada por la cámara. En el ejemplo del vídeo podemos observar como el brazo del usuario tapa la parte de la correa que está por detrás. De esta forma conseguimos dar la impresión de que la correa del reloj da la vuelta a la muñeca, y se logra un efecto más real.